Relatos en la cocina

La cocina es el centro del universo. La frase es realmente redonda. Supongo que la habrá escrito alguien antes que yo. Pero ello no la convierte en menos cierta. Independientemente de cómo viva el ser humano, solo o en compañía de otros, esta frase si es de alguien, alrededor de la cocina se genera el hogar, la querencia que todo ser tiene mientras transita por este mundo.
En la cocina, en la mía y en la de alguna gente que conozco, también hay libros, libros de cocina y libros de recetas. Libros a los que se recurre cuando se quiere experimentar o cuando se necesita refrescar las ideas o modificar los hábitos. Pero también hay libros para leer. Desde hace años, bastantes, conservo con cariño un libro titulado A cociña moderna de Galicia publicado por Espasa-Calpe y escrito por el periodista Jorge Víctor Sueiro, que él mismo me regaló en su día. Sueiro realiza una introducción muy interesante antes de presentar las mejores recetas de una docena de los mejores restaurantes gallegos de los años 80 del siglo pasado.Estos días he recurrido a él.

Sin embargo, mi mayor deleite fue releer a mi admirado Álvaro Cunqueiro, concretamente ha sido un deleite que me ha inspirado mucho A cociña galega, editado por Galaxia, en el que el ilustre mindoniense repasa lo esencial de nuestra gastronomía desde la perspectiva de un contador de historias. De los caldos a los suculentos cocidos, de las carnes a los pescados y mariscos, sin olvidar los postres. Es absolutamente recomendable su lectura. Otro capítulo aparte merece el título cuya autoría compartió con el no menos ilustre José María Castroviejo, me refiero al Viaje por los montes y chimeneas de Galicia, editado por Austral. Pero de la caza y su cocina desde la perspectiva de ambos escritores hablaré otro día.
Porque entre receta y anécdota, entre viaje por las esencias y la geografía gallega, he ido intercalando en mis lecturas un libro de relatos que he leído con cariño, con el cariño que se merece la obra de un amigo que es escritor con letras mayúsculas, aunque a él le siga dando reparo creérselo. Me refiero a Andrés Pérez Domínguez y a su libro El centro de la tierra, publicado por Paréntesis.

Como ya he dicho, se trata de una colección de diez relatos escritos por el autor en varias etapas de su vida, el último de los cuales da título a la publicación. Sirve, este libro, para ver una evolución narrativa y estilística, y también temática, esa que los críticos agradecen para comprender mejor la obra completa de un autor. Andrés se abre aquí en canal, porque en cada relato hay mucho de su impronta como persona y como escritor, de lo que quiere trasmitir como notario de este tiempo, de lo que logra transmitir con brillantez.
Espero su nueva novela, con la que ganó este año el Ateneo de Sevilla. Pronto llegará.

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